La periodista Marta Riesko lo ha pasado muy mal en los últimos meses. Su repentino despido de El Programador de Ana Rosa y posterior ruptura con Antonio David Flores cambió por completo su vida, destrozándola pero recuperándose lentamente.

Pero Liesko había luchado durante mucho tiempo con las consecuencias de su relación con un exfuncionario público. Cuando su historia de amor se hizo pública, el público español todavía creía que Flores estaba felizmente casada con Olga Moreno, lo que dejó a Risco como un "cazador de celebridades" y un "saboteador de matrimonios". Tras años de silencio, el reportero ha querido compartir con los lectores de Iberoshow cómo pasó los días en los que tuvo que dejar el programa en el que estaba trabajando por su ansiedad.

A medida que se difundió la noticia, Lisco se convirtió en una celebridad. Cientos de periodistas la acosaron día y noche, y miles de personas la criticaron en las redes sociales, convirtiendo su nombre en trending topic actual. Ante tal situación, la joven sintió tantos dolores que los médicos le dieron baja por enfermedad. "Marta, te llevaremos al pueblo. El médico dijo que necesitas descansar. (...) Estamos todos muy preocupados", le dijo su madre.

Al llegar a este pequeño municipio a solo una hora de la capital, su madre renunció al teléfono móvil, las redes sociales y la televisión. Todos fueron entrenados para no hablar del tema y trataron de mantener el agua quieta, pero la joven se esforzó mientras tomaba pastillas, miraba Netflix, dormía la siesta y caminaba.

Ningún programa, como Sálvame, Viva la Vida o Socialité, no la acusó de ser una "mala experta" por cuestionar la veracidad de su baja por enfermedad, pero esto dolió profundamente a la periodista.

"En la noche, cuando ellos estaban dormidos, me levanté y tomé el teléfono del esposo de mi mamá y llamé a la persona de la que estaba enamorada. Estaba buscando otro teléfono que pudiera comunicarse con él. Fue un castigo", admitió.